martes, 18 de agosto de 2009

FW:fw: pásalo!

Yo puse Internet en casa por primera vez allá por el año 2000 ó 2001. Mi primer contacto con la red había sido apenas dos o tres años antes, siendo ya universitaria. Por aquel entonces, lo primero que conocías eran portales con buscador como terra o yahoo, el messenger estaba dando sus primeros pasos, y lo primero que hacía casi todo el mundo cuando se iniciaba en los mundos interneteros era chatear.

En el amanecer de mis tiempos interneteros, no sólo enviaba y recibía con cierta frecuencia emails personales, de esos en los que contabas tus cosas a alguno de tus amigos y éste te respondía en otro mail poniéndote al día de su vida, sino que empezaba la moda de los reenvíos y los mails en cadena. La mayoría eran simples e inofensivos textos copiados y pegados: desde un monólogo del club de la comedia, a una recopilación de chistes de rubias, al clásico de curiosidades en el que nos comentan que es imposible lamerse el propio codo y que concluye afirmando que el noventaytantos por ciento de las personas que reciben ese mail prueban a lamerse el codo. Festival del humor, aunque por entonces eres nuevo en eso de la red de redes, te divierte recibirlos, y te divierte reenviarlos... y de esos polvos vinieron esos lodos.

Casi una década después, recibir un email personal es una rareza, y los emails de reenvíos saturan tu correo más que las ofertas de viagra o de casinos on line, sobre todo si te da cosilla incluir la dirección de tus amigos a la carpeta de spam. A veces, muy de tarde en tarde, te llega algo que realmente te hace gracia, pero para encontrarlo puedes verte en la necesidad de abrir decenas de emails repetitivos, cargantes, molestos o directamente ofensivos. Afortunadamente, no suele llevar demasiado tiempo aprender a distinguir quiénes de tus amigos envían cosas que realmente pueden hacerte gracia, y quienes le dan automáticamente a reenviar a cualquier cosa que lleve a su correo, independientemente de que sea el final apócrifo de Star Wars, un video de youtube con Esperanza Aguirre doblada por Gracita Morales o una arenga llamando a la refundación del nazismo.Si en el asunto pone que lo que viene a continuación es "Jaja, buenísimo", o bien "Una verdad como un templo, pásalo", es evidente que el contenido será digno de ser difundido, porque todo el mundo sabe que los títulos de los emails nunca mienten.

No sé a los demás, pero a mí éstas son las cosas que me ponen de más mala leche cuando me las encuentro en la Bandeja de Entrada:

- Power points con fotos de bebés o cachorritos y frasecitas pseudofilosóficas de Paulo Coehlo o similares. Guías para la vida en estado puro. Todos llevaríamos una existencia absurda sin rumbo ni guía si no pudiéramos recibir por correo la foto de un cachorro de labrador que nos dijera "amar no es mirarse a los ojos sino mirar los dos en la misma dirección".

-Leyendas urbanas y advertencias apocalípticas varias: Desde el messenger que van a cerrar si no reenvías el mensaje a tus ochenta y siete amigos más íntimos, hasta la última campaña terrorista de la ETA que te da el cambiazo de tu móvil por un móvil-bomba réplica exacta del tuyo para que cuando le des a la tecla de llamada tu cabeza acabe en Cuenca, pasando por el peligro mortal que tienes por consumir Red Bull ya que está fabricado a partir de cocaína mezclada con pis de gato. Los medios de comunicación están vendidos y los periodistas escribimos lo que nos da la gana (pero esto se merece un post aparte), así que la gente recurre a Internete, que es donde se halla la verdad, para informarse y compartir con toooda su lista de correos esta información de primera mano que por algún oscuro motivo, los medios no quieren compartir.

- Cadenas del amor y la suerte. Sí, la evolución de la clásica carta en cadena de nuestra infancia. Con la ventaja de que no tienes que copiarla a mano o gastarte en fotocopias, y la desventaja de que incluye un montón de gifs animados a cuál más hortera y visualmente dañino. Mis favoritas son las que acaban con algo del tipo "si reenvías esto a diez personas y luego pulsas f5, aparecerá en la pantalla el nombre del chico/a a quien más quieres". Que digo yo, que si de verdad estás tan pillado por esa persona, te acordarás de cómo se llama sin necesidad de colapsar el correo a tus amigos con emails escritos en Comic Sans de cuerpo 24 y adornados con ranitas y pajaritos que se mueven y parpadean...

-Propaganda ideológica. En mi caso, lo que más a menudo me llega son powerpoints antiabortistas con fotos de bebés (como los del primer punto pero, en vez de traer citas de Coelho, ponen frases del tipo "hola, mami, estoy en tu útero, te quiero mucho, por favor no me mates"), o mails que empiezan por la gloriosa frase: "esto no es racismo, es una verdad como un templo": Según la lógica de internete, si empiezas diciendo que no es racismo puedes soltar cualquier perla xenófoba sin que se te pueda chistar. Según la misma regla de tres, si en vez de resisitirse a condenar los atentados, Batasuna se dedicase a mandar emails en cadena alabando la labor de ETA pero que comenzaran con "esto no es enaltecimiento del terrorismo, es una verdad como un templo", a ver quién era el guapo que los ilegalizaba. Naturalmente, siempre puedes intentar atajarlo con un educado email explicando a quien te envía estas cosas que no compartes tus ideas... o contraatacar con lo más cafre que encuentres de la ideología opuesta: mucho menos asertivo y constructivo, pero muuucho más divertido.

- Avisos de que "Fulanito de Tal" quiere ser mi amigo en el Facebook. Dándose el caso de que Fulanito de Tal sea el macarra que me hacía la vida imposible en el cole, el ex amigo con el que me dejé de hablar años atrás después de alguna puñalada trapera, o cualquier otro personaje al que habías visto desaparecer con más alegría que a la moda de las chaquetas con hombreras. Aunque el protocolo de agregaciones de Facebook también sería un tema que merecería un desarrollo aparte....

Así que, amigos míos que por casualidad (o porque yo os haya dado la dirección) recaléis en este blog, avisados estáis: pensároslo dos veces antes de pulsar la tecla de reenvío....

8 comentarios:

Ezne dijo...

Yo también sobreviví a esa época de los inicios de leer todosssssssss los reenvios que te enviaban... (Incluyendo frases filosóficas, esas también)

desde que aprendí a borrar los emails sin leerlos... Mi vida ha mejorado infinitamente :P

MissMurphy dijo...

Ya te digo... y eso que tengo un par de amigas que, además de mandar ocho o nueve reenvíos al día, encima luego me preguntan: "¿y te llegó el correo que te envié?¿Y viste ese tan gracioso que te mandé de que es imposible lamerse el codo?"

Etiam dijo...

¿Reenvíos? ¿Qué es eso? Si a mí me mandan algo original o gracioso, estupendo, pero cuando veo por 1000000º vez que es imposible lamerse el codo me dan ganas de soltar a lo borde "vete a lamer...sellos" xD

molinos dijo...

asi que no te gustan los envios en cadena y pretendes convertir mi post sobre lo romántico y lo cursi en un mail en cadena??...no sé como tomármelo...:)

Bienvenida al mundo bloguero, ya verás como le coges el gusto.

Saludos

jajajaj..me parto para dejar el comentario me pide como palabra de verificación " cursiz"...que coincidencia.

MissMurphy dijo...

Es que si no puedes combatir al enemigo, únete a él... y sí, lo de la palabra de verificación se trae tela, no sé si es casualidad o que el blogger observa y tiene mucho sentido del humor...

nina dijo...

Yo empecé con el IRC, y traicionando al todopoderoso hotmail por mixmail, que lo de crreo caliente me resultaba demasiado zafio :P Pues sí, dependiendo de quién mande los forwards no me molesto ni en abrirlos... Conductismo puro oiga.

Bego dijo...

Miss donde hay que firmar para q t den el Pulitzer o en su defecto una columna diaria en algun periódico de tirada nacional??

Bueno pues q como otras muchas veces, suscribo lo q escribes.

Quien no se siente identificado?? Desde los inicios hasta el día de hoy y casi letras por letra.

Muack

Pikifiore dijo...

Puaggg,cómo me jodia a mí de pequeña la tipica cartita en cadena...Ahora de los mails moñas paso...Un beso